lunes, 28 de diciembre de 2009

La década sin nombre... por Alvaro Cueva

Hace diez años todos estábamos muy emocionados esperando la llegada del año 2000. ¿Se acuerda?Hoy, ni quién le haga fiesta a la llegada de los años 10. Es más, casi nadie se ha acordado del final de esta década y la mayoría de las personas no saben ni cómo llamarla.¿Fueron los años cero? ¿Los años 2000? Quién sabe, pero ya se acabaron y hay que ver qué pasó en materia de televisión.Para empezar, usted y yo presenciamos el empoderamiento de la gran pantalla chica. En los últimos diez años, la televisión adquirió más poder que nunca.Nuestros monitores se transformaron en ministerios públicos virtuales que nos dijeron quién era bueno y quién era malo, en qué había que creer y en qué no.Y lo vimos con Vicente Fox, y lo vimos con la marcha zapatista, con los videoescándalos, con el desafuero de López Obrador, con las elecciones de 2006 y con la “spotiza”.Esto se convirtió en un manjar de caníbales que devoraron lo mismo a Gloria Trevi y a Carmen Campuzano, que a Sven Goran Ericksson y a Ana Gabriela Guevara.Salvo casos históricos como la cancelación de la llamada Ley Televisa, nada ni nadie pudo frenar a la televisión.Por lo mismo, se cometieron infinidad de abusos, se mató a la comedia, se eliminó al melodrama y salvo casos muy aislados de admirable valentía, esto se transformó en un pavoroso híbrido de notitas, chismecitos, bailecitos, escandalitos y ocurrencias.En términos comerciales, en la década que está por terminar, los televidentes mexicanos pasamos de los infomerciales al apoyo a los gobiernos patrocinadores, de las menciones comerciales a las promociones “llame ya”, y de los anuncios en el cable a los cortes comerciales de más de 10 minutos.En términos editoriales es impresionante la cantidad de chatarra que consumimos porque, con el pretexto de que había que vender, la mayoría de nuestras televisoras abusaron de la violencia, el sexo, las groserías y el mal gusto para incrementar sus niveles de audiencia y vender a cualquier precio.¿Usted cree que en otras décadas se hubieran podido transmitir títulos como “Muévete”, “Ellos vs. Ellas”, “Central de abasto”, “El club de las baquetonas” y “12 corazones mexicanos rumbo al altar”?Sólo en ésta en que, además, el concepto de privacidad se transformó gracias a la tecnología y al lanzamiento de “reality shows” como “Big Brother”, “La academia”, “Cantando por un sueño” y “Los cinco magníficos”.En los años 2000 cambiaron muchas cosas a nivel valores. Nos volvimos “populares”, anoréxicos, hicimos del amor un espectáculo y del dinero, nuestro dios.No fue casualidad que con los cambios políticos del 2000, se nos hayan olvidado temas como la fidelidad y el agradecimiento, y que hayamos visto a tanta gente ir y venir de una televisora a otra, y hasta combinar varios canales a la vez, con tal de sobrevivir, de crecer o de hacer fama y dinero.Y así como en algunas empresas presenciamos contrataciones que en otros tiempos hubieran sido inimaginables, vimos a luchadores convirtiéndose en comunicadores, a actores en periodistas y a la gente de la prensa escrita haciendo, al mismo tiempo, televisión, radio e internet.Fuimos más allá del “multitasking”. Y así como nos acostumbramos a esto, nos acostumbramos a que a cada rato nos cambiaran la programación de todos los canales, la duración de los programas y el sentido de las historias, incluyendo las noticias.En cuestión de dos lustros, la televisión evolucionó de “caja idiota” a “caja histérica”.Si no vivimos en emergencia por lo de las Torres Gemelas, fue por la influenza. Si no fue por el tsunami, fue por los huracanes. Y si no fue por el ántrax, fue por los secuestros.No por nada, en los últimos diez años, mucha gente emigró de la televisión abierta a la televisión de paga, a los DVDs, a las descargas, al Internet y/o a los videojuegos.Ahí, los años cero fueron otros. La televisión internacional, por ejemplo, vivió una especie de época de oro gracias a toda la gente que dejó de divertirse fuera de su casa, en Estados Unidos, por las campañas de terror.Para muchas personas, las series se convirtieron en el nuevo cine y figuras de todas las ramas de la industria cinematográfica como Quentin Tarantino, Glenn Close, Ridley Scott, Peter Coyote y Steven Spielberg, se pusieron a hacer televisión.¿Resultado? Una década gloriosa de grandes títulos como “C.S.I.”, “Sex and the City”, “The Sopranos”, “24”, “House, M.D.”, “Smallville”, “The Tudors”, “Lost”, “The West Wing”, “Mad Men” y “Desperate Housewives”, por mencionar sólo unos cuantos.¡Uff! ¡Qué década! Hace diez años todos estábamos muy emocionados esperando la llegada del año 2000.¿Qué estamos esperando ahora? ¿Cómo estamos acabando la primera década de este siglo? ¿Cómo estamos terminando los primeros diez años de este milenio? ¡Cómo!acueva@milenio.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario